Chesterton fue antiliberal, desde la defensa de la pequeña propiedad para todos, y fue antisocialista, desde la justicia social basada en el evangelio. Por ello su propuesta distributista, fundada en el gremialismo histórico, el tradicionalismo político británico y el Magisterio social católico, fue despreciada por las grandes ideologías dominantes, que situaron al Estado o al Mercado como las divinidades contemporáneas…